Tragaperras clásicas

El nacimiento y crecimiento de la tragaperras clásica

La Liberty Bell presentaba tres rodillos con símbolos de naipes -corazones, picas y diamantes- junto con la imagen de una Liberty Bell agrietada, que otorgaba el premio más alto de 50 céntimos por una combinación de tres iguales. La abrumadora demanda de máquinas Liberty Bell fue señal de una industria floreciente. En 1907, Herbert Mills, un fabricante de máquinas recreativas con sede en Chicago, inició la producción de máquinas tragaperras similares denominadas «Operator Bell», introduciendo símbolos frutales como cerezas, limones y ciruelas. Esta innovación marcó el inicio de las primeras máquinas tragaperras de frutas.

A diferencia de sus homólogas avanzadas, las tragaperras clásicas suelen renunciar a las tiradas gratuitas y a las rondas de bonificación elaboradas. Sin embargo, esta simplicidad no les ha impedido ofrecer sustanciosos botes. Conocidas históricamente como Fruit Machines, One-armed Bandits o Bell Machines, estos juegos derivan sus nombres de los símbolos en sus rodillos, predominantemente frutas, campanas, 7s de la suerte, diamantes y BARs. El apodo de «bandido manco» se debía a las palancas de las máquinas, de las que tiraban los jugadores para hacer girar los rodillos en cada ronda.

El impacto transformador de las tragaperras clásicas es evidente en las historias de numerosas personas que encontraron la fortuna gracias a un golpe de suerte en un casino. Curiosamente, las primeras máquinas tragaperras no daban premios en metálico, sino que recompensaban a los jugadores con chicles de sabores correspondientes a los símbolos de fruta alineados en los rodillos. Este novedoso sistema de recompensa también servía para contrarrestar las leyes contra el juego de la época. Hoy en día, las tragaperras clásicas siguen siendo un elemento cautivador en los casinos, y los bandidos mancos siguen ocupando un lugar especial en las casas de juego y en los corazones de los jugadores.

Mecanismos y características de las tragaperras clásicas

Las tragaperras clásicas, conocidas por su diseño más sencillo y modesto en comparación con la plétora de vídeo tragaperras, siguen cautivando al público español. El encanto de estos juegos reside en su aspecto retro y en los sentimientos nostálgicos que evocan los símbolos tradicionales de frutas, barras, campanas y 7s de la suerte. Normalmente, las tragaperras clásicas se reconocen como juegos de 3 rodillos, aunque existen variantes con 5 o incluso 7 rodillos. Los rodillos pueden tener 1, 3 o 5 filas, y se muestran en una pantalla de vídeo o en una máquina mecánica.

En la mayoría de los casinos en línea, las tragaperras clásicas y las de vídeo están segregadas en categorías distintas, a menudo con subdivisiones adicionales. Las tragaperras de vídeo, conocidas por su abundancia y diversidad, superan en número a sus homólogas clásicas. Sin embargo, las tragaperras clásicas se distinguen por ciertas características:

• Típicamente 3, 5 o 7 rodillos, con algunas excepciones.
• Los rodillos pueden contener 1, 2 o 3 rodillos.
• Los símbolos incluyen frutas, barras, campanas, 7 de la suerte y mucho más.
• Las líneas de pago van de 1 a 5, con excepciones.
• Imitan la apariencia de las máquinas tragaperras físicas.
• Menos funciones y extras.
• Juego sencillo y directo.
• Diseño retro.

La característica que define a las tragaperras clásicas suele ser su estructura de 3 carretes, lo que contribuye a su sencillez de juego. Aunque algunas tragaperras de vídeo imitan los diseños clásicos, la principal diferencia radica en el número de carretes y la complejidad de las funciones. Las tragaperras clásicas suelen tener de 1 a 5 líneas de pago y emulan la estética de las máquinas tragaperras físicas. Las tragaperras clásicas modernas pueden incluir temas variados y a veces incluso botes, mezclando la tradición con las tendencias de juego contemporáneas.

Funcionalidad de las tragaperras clásicas

Tanto las tragaperras clásicas como las de vídeo utilizan generadores de números aleatorios (RNG) para determinar el resultado de cada giro, lo que garantiza la equidad y la imprevisibilidad. Las tragaperras clásicas más recientes tienden a ofrecer pagos más altos que los modelos más antiguos, que tenían carretes físicos que limitaban el número de combinaciones de símbolos posibles. Las tragaperras clásicas actuales, parecidas a las antiguas máquinas tragaperras de los casinos físicos, ofrecen pagos más altos gracias a los RNG y a las plataformas de vídeo.

Cada juego de tragaperras clásicas y de vídeo tiene su propio porcentaje de retorno al jugador (RTP), que suele rondar el 96%. El RTP está inversamente relacionado con la ventaja de la casa, indicando el porcentaje de pago esperado a largo plazo. Este porcentaje se calcula mediante pruebas exhaustivas en numerosas tiradas. El uso de RNGs y RTPs individuales es un hilo común entre las tragaperras de vídeo y las clásicas, garantizando la equidad y la transparencia en el juego.

Características extra en las tragaperras clásicas

Aunque las tragaperras clásicas pueden carecer de la abundancia de características que se encuentran en las tragaperras de vídeo, no están desprovistas de extras. Las características comunes en las tragaperras clásicas, reflejadas en las máquinas físicas de pubs y casinos, incluyen:

• Supermetro: Un juego adicional de rodillos o una característica similar, que permite a los jugadores apostar sus ganancias para obtener mayores premios, aunque con un mayor riesgo.
• Modo de juego: Una función de lanzamiento de moneda 50/50 presente en muchos juegos de tragaperras. Después de cada ganancia, los jugadores tienen la opción de apostar sus ganancias, duplicándolas potencialmente o perdiéndolas por completo.

Tragaperras clásicas vs tragaperras de vídeo

El panorama de los casinos en línea está repleto de tragaperras en 3D, progresivas y de vídeo de gama alta que presumen de gráficos impresionantes. Mientras que las tragaperras clásicas pueden luchar por competir en esplendor visual, ocupan un lugar especial para aquellos que buscan simplicidad y nostalgia. La elección entre las máquinas tragaperras de frutas y las tragaperras de vídeo repletas de funciones a menudo se reduce a las preferencias personales y al deseo de un juego sencillo.

Las tragaperras clásicas siguen siendo un elemento básico en las carteras de desarrolladores de juegos tanto prominentes como menos conocidos. Los jugadores pueden encontrar títulos clásicos de Microgaming, Novomatic, Playtech, IGT, WGS Technology, iSoftBet, Amaya, Play’n GO, Betsoft, Big Time Gaming y Pragmatic Play, entre otros. A pesar del atractivo de las tragaperras de vídeo, con sus efectos visuales mejorados y una jugabilidad envolvente, las probabilidades de ganar se rigen en última instancia por el RTP y el RNG, lo que hace que la elección entre tragaperras clásicas y de vídeo sea una cuestión de preferencia personal más que de rentabilidad potencial.

Conclusión

Las tragaperras clásicas han resistido el paso del tiempo y siguen encantando a los jugadores españoles, tanto en los casinos online como en los físicos. Su atractivo reside en la nostalgia que evocan y en la sencillez de su jugabilidad. Tanto si eres un jugador experimentado como si eres nuevo en el mundo de los casinos, las tragaperras clásicas ofrecen una experiencia de juego accesible y sencilla.

Para descubrir su estilo preferido de tragaperras, regístrese en un casino en línea de confianza y explore su amplia biblioteca de juegos. Si es nuevo en el mundo del juego, las tragaperras clásicas son el punto de partida ideal, ya que ofrecen facilidad de juego sin características abrumadoras. Sumérjase en el mundo de las tragaperras clásicas y descubra por qué son las favoritas de los jugadores.